Una vez más, ha cambiado el vínculo entre los Estados Unidos y la Argentina.
Hubo amor sin límites en la época del Dr Carlos Menem -recordado por muchos como el mejor presidente de los argentinos y además es el único que fue reelecto- y también se vivió una animosidad cercana al menosprecio en la última cumbre de las Américas celebrada en Mar del Plata en el año 2005.
Hoy los Estados Unidos y la Argentina viven un minué de desencuentros, declaraciones poco felices y ninguneos varios.
Las interpretaciones abundan: se habla de popularidades relativas, expectativas incumplidas y/o intereses exacerbados, pero la verdadera razón es muy sencilla y se basa en una incomprensión que anida en el centro del poder de la Argentina que es hoy -sin la menor duda- el matrimonio Kirchner y sus aliados presentables e impresentables.
La duda cruel que aqueja el corazón de los “K” -y que es la semilla presente en todas las sospechas del gobierno en relación a USA- puede resumirse en esta pregunta crucial: ¿Cómo puede ser que Obama sea negro y no sea peronista?
No es asi! El Peronismo no discrimina por color!! Como decia el General: "Peronistas? Peronistas somos todos!"
ResponderEliminarSi Obama aparenta no ser peronista, es porque aun no pudo hacerse su aeropuerto privado, o mandar su dinero a Suiza, o comprarse su hotel en El Calafate. Pero, apenas tenga tiempo, ya se va a mostrar como Peronista.
Eduardo
Tiene razón Eduardo, este país se merece gente como Carlos Menem, Rodriguez Saa, Duhalde y De la Rúa!!!(aunque no sea peronista) No queremos un gobierno que se ocupe de la inclusión social y una distribución más justa. Sigamos leyendo Clarín y La Nación, veamos los noticieros que informan al minuto de manera sesgada. Repitamos todo lo que oimos como loros sin analizar nada, nos va a ir bárbaro!!!!!!! Sigamos sintiéndonos representados por gente que no nos representa ni nos representará jamas, que contribuye día a día a la crisis institucional, que en vez de proponer soluciones patea cualquier iniciativa, opongámonos por oponernos, es un excelente ejercicio!!!!!!!!!!
ResponderEliminarConcuerdo con malenushka!! Si Menem avisó que su interes estaba en las Ferraris Testarrosas, si Néstor avisó de su interés en acumular dólares, hoteles y propiedades por la Patagonia, si Cristina avisó que es capaz de impedir la protección a los glaciares con tal que la Barrick Gold ayude a los intereses de su marido, si Macri avisó que su interés es hacer negocios con la ciudad, si De la Rúa se pasa una vida mostrando ser un inútil, si Duhalde aunque se queje fué el que hizo posible a Menem y a Néstor, si todos avisan y muestran sus verdaderos intereses y agachadas….pero la gente los sigue votando, entonces está claro que este país se merece gente como Menem, Néstor, Cristina, Duhalde, De la Rúa, o Macri.
ResponderEliminarEn el fondo, es simple: si los que uno vota son ladrones e/o incompetentes, la culpa de que después los dirigentes sean ladrones e/o incompetentes es de la gente que los vota. Para esta gente, lo ideológico es solo una excusa. El compañero Néstor se abrazaba y elogiaba al gran presidente Menem, quien alababa y agradecía al compañero Duhalde, quien …
Hoy día el peronismo no es el peronismo. El peronismo actual es una forma de hacer política. Son peronistas desde Menem hasta Macri, pasando por Carrió, Cobos y los Kirchner. Tan así es la cosa, que hay un elenco estable de muchachos que están siempre presente en todos los gobiernos (Scioli, Redrado, Solá, Moyano) y solo cambian de compañero cuando la mano se les viene fea (eso sí, con gritos cruzados de diferencias ideológicas insuperables que hasta hacía 5 minutos antes ni existían!)
El peronismo hoy día es muy parecido a lo que era el PRI en México: una plataforma para lograr poder a través de alianzas y traiciones en la cual sus miembros cambian de bando sin mucho problema si eso les asegura poder y donde la ideología es solo una excusa.
Lamentablemente, y tenés razón malenushka, la gente parece no advertir que lo ideológico es solo una excusa de estos ladrones. Por lo que tenés razó, el país tiene la dirigencia que se merece.
Eduardo
PS: En la Argentina de hoy, hay pocos dirigentes decentes. Todos fuera del peronismo (definido como esa masa de ladrones permanentes) claro. Los dos más notables son Pino Solanas y López Murphy. Ambos en las antípodas ideológicas, pero decentes. Lamentablemente la gente no se pone a optar entre alguno de estos dos (u otros), sino que insiste con la mafia del PRI argentino. Y bueh, tenemos lo que nos merecemos.