viernes, 5 de octubre de 2012

Dime a quién odias


Nuestro amigo el filósofo J.P. Feinmann conjeturó en público sobre los motivos por los que la gente odia a la presidente Cristina Fernández de Kirchner.
Expresó las razones en base a una taxonomía de género ya que si bien reconoce que Cristina es odiada tanto por hombres como por mujeres, entiende que esto ocurre por razones distintas.

Reproducimos lo dicho por JPF sobre los motivos por los que el género masculino odia a Cristina:

"¿Cuál es la explicación de lo que le pasa a un hombre que odia a la Presidenta? Algo mucho peor que la envidia: el miedo. Terror ante una mujer que está lejos, que es imposible, que tiene el tupé de ser superior a él. El tipo tiene un odio tremendo porque sabe que esa mujer es imposible para él ...  Lo pone mal que una mujer más inteligente que usted, que la mayoría de las mujeres y de los tipos que andan por ahí, de los machos acostumbrados a hablar de las mujeres entre insultos y bajezas … Es una de las más grandes insatisfacciones saber que por más que uno insulte a alguien, ni lo va a rozar. Eso lo llena de odio y no quiere ser gobernado por una mujer"

Nos preocupa que J. P. Feinmann deje de lado la filosofía para incursionar en el psicologismo barato ya que tememos perder un frecuente invitado a estas páginas. Tal vez sus libros ya no se venden como antes y estará tanteando si sus argumentos son aptos para las revistas de peluquería o los teleteatros de la tarde.

Pero no vamos investigar el sentido del humor de José Pablo -aunque tal vez sí habría que considerar la posibilidad de que haya hablado en serio- solo queremos señalar que sus argumentos sobre el odio de los argentinos hacia Cristina tienen algunos problemas:

- Hay miles de mujeres bellas, inteligentes, talentosas, con fortunas inmensas. Estas características las convierten a todas ellas en superiores a los redactores de Noticias Falsas que somos pobres, feos y desconocidos, pero ¡NO LES TENEMOS TERROR ... NI SIQUIERA UN MIEDITO!
Las admiramos, deseamos, envidiamos, aplaudimos … pero para que haya terror u odio se requiere algo más que José Pablo omite señalar. 

- Sin rebuscar demasiado en la historia ni en la geografía, en esta década Dilma en Brasil y Bachelet en Chile supieron ser mujeres poderosísimas que ejercieron el poder y no han sido temidas ni odiadas. ¿Será porque chilenos y brasileños son menos machistas que los argentinos o porque habrá otras variables en juego?

- Si las mujeres odian a Cristina porque la envidian y los hombres la odian porque le temen, parecería que los únicos capaces de formular juicios políticos objetivos son los gays, lesbianas, travestis, bisexuales, transexuales, filósofos de Carta Abierta y militantes de La Cámpora ya que todos los demás estaríamos atravesados por nuestros prejuicios de género.

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