Festejo desmedido

Durante años, hablar de la fuga de capitales fué una forma inequívoca de declararse en contra del gobierno de los Kirchner.

Esta “fuga de divisas” señalada con alarma por múltiples fuentes y reconocida por los organismos oficiales era -según la verborragia y los medios oficialistas- un cuco de los malos de siempre, el campo, los medios, los neoliberales, cuyo único objetivo era asustar a los idiotas útiles (o sea a quienes disienten con el oficialismo) por creer en la prédica destituyente de los que quieren la patria chica.

El cómico Diego Capussotto -a quién creo un buen humorista- incluyó en el speach pro-pánico de su personaje Arnaldo Pérez Manija, referencias a los miles de millones de que se fugaban caricaturizando el tema como si fuera solo una tara más de quienes se esmeraban en ver todo negativo.

En estas circunstancias, Noticias Falsas no entiende el triunfalismo del pasquín oficialista EL ARGENTINO que en su edición de hoy titula en primera página que la fuga de capitales -ésta que solo existía en la imaginación opositora- ha menguado, llegando al nivel de 450 millones de dólares en septiembre del 2009.

Es un genuino motivo de alegría que la huida de capitales se haya morigerado y bien podría presentarse como una buena noticia, pero dado que desde el oficialismo y sus medios afines siempre se negó que esta fuga existiera, más que festejar deberían pedir disculpas por la obcecada negación del problema. 

Lo mejor será que de acá en más, los datos del movimiento de divisas salgan de la órbita del Banco Central y sean informados por el INDEC.